Hoy en día está de moda lo inteligente, los smart. ¡Todo es smart! Los smartphones, los smartwatches, la smart TV... pero si hay algo que realmente es inteligente-smart es la ciencia ya que, en la actualidad la cantidad de datos que se tienen de cualquier experimento es tan grande que están centralizados en un servidores y los investigadores solo tienen que acceder a ellos para consultarlos, descargarlos, procesarlos... en definitiva, para hacer ciencia.
Pero hay un problema. Todo, por muy inteligente que pretenda ser, necesita estar interconectado entre sí y a otros servidores para conseguirlo, es decir, las "cosas" quieren conectarse entre sí para ponerse a tu servicio pero no pueden hacerlo sólas, dependen de que tú las ayudes a comunicarse. ¿Estás dispuesto a hacerlo?
Te propongo que aproveches todas las ventajas que ofrece el IoT (Internet of Things) para descubrir algunos de los secretos que guarda el Universo construyendo un dispositivo ad-hoc que te muestre en una pantalla, a golpe de tap, parte de la información más relevante de algunos de los objetos que pueblan el sistema solar y, posteriormente, de algunos de los exoplanetas más interesantes desde el punto de vista científico.
- Definición:
Es la abreviatura del término en inglés "Internet of Things" cuya traducción es "Internet de las Cosas" y consiste en la interconexión autónoma de objetos y dispositivos que pueden captar, transmitir y recibir datos para actuar en consecuencia.
- Ejemplo:
El automóvil del futuro no necesitará conductor gracias al IoT.